Un baño relajante

Contradiciendo sus deseos comienzo a movere más rápido, moviendo su cabeza con una de mis manos para prenderme a su cuello, mordiendo y besando sin contemplaciones para reprimir cualquier sonido que quiera escapar de mis labios al mismo tiempo que mis manos, completamente descaradas, acarician con lujuria contenida cada parte de su cuerpo; hacía un buen tiempo que no castigaba a nadie de este modo, ya hasta había olvidado casi lo que era y lo mucho que lo disfrutaba. Ya dentro de poco se correría, eso estaba seguro, pero haría de todo por aguantar hasta donde pudiera para seguir disfrutándolo por más tiempo aún.

El mentor... no pararía, mis suplicas eran en vano... sus caricias y besos en mi cuerpo para mi eran repognantes... no sabia como pude caer en esto... quería ser rebelde... contradecir a mi padre, pero a cambio recibo este trato en este lugar... estaba perdiendo las esperanzas de salir de este lugar. Mi cuerpo ya estaba cansado... yo estaba cansado.. ya no podia llorar mas... solo debia esperar que terminar por correrse el mentor dentro de mi cuerpo. Ya no ofrecia resistencia ya estaba cansado... así que lo unico que podia hacer era ceder.

No se si alegrarme o no ante su sumisión, toda oposición ha sido dejada de lado, lo que volvería esto extremadamente aburrido de no ser porque su cuerpo sabe exquisito; ¿qué dirá 'Dios' ante esto? ¿Juzgaría este acto de deplorable acaso? Gracias a él estoy en esto, al principio odiaba la idea de meterme en un seminario, pero al notar que todo acto repugnante a la sociedad podía realizarse sin que nadie se enterara pronto cambié de idea.

-No niegues que lo disfrutas, pese a que no te agrade la forma en que sucede no puedes dejar de sentir bien cada caricia, ¿verdad? Tu pene es claro testigo de ello, lo siento palpitar en mi mano, extasiado. Todo lo que la mente tacha de repugnante nuestros sentidos lo aceptan complacidos, ¿no te parece curioso?

Salgo de su interior con fuerza, volteándolo del mismo modo para verlo a la cara y volver a ingresar con la misma rapidez, dejando que un gutural gemido invada todo el cuarto y que parte del agua de la tina vaya a parar al suelo por los secos movimientos; de nueva cuenta comienzo a moverme, manteniend el ritmo que llevaba, sintiendo próximo el final.

Era verdad... no podía negar que aparte del dolor sentía placer...
Todo era verdad... pero... no podía dejarme hacer de esa manera.. se suponía que este era un lugar distinto...
Pero.... acaso de verdad ese era mi destino?... era cierto que lo disfrutaba...acaso terminaría deseando mas en un futuro?
Solo Dios sabia la respues... y aunque no era muy religioso... en ese momento pensse en el.
Depronto el mentor sale de mi. senti dolor pero me voltea coge mis piernas las levanta e introduce de igualmanera su miembro sin dejar el ritmo..No pude resistirme en aferrarme en sus brazos fuertes... de pronto empezaba a gemir de modo que ya estaba empezando a disfrutar el acto.

Sontío con algo de prepotencia al notar su repentino cambio, cierto que me estaba gustando el dañarlo, que supuestamente le estaba dando una lección para que no volviese a infringir las reglas, pero la idea de corromper tan inocente ser hasta el punto de volverlo adicto al sexo si me fuese posible se me hace mucho más gratificante; 'Dios' perderá a sus adorados angelitos, fieles seguidores que aunque al principio se opongan tarde o temprano terminarán rindiéndose al placer de la carne, nustro propio instinto nos guía al pecado, mayormente aún a uno tan delicioso y satisfactorio como lo es la lujuria.

-Comienzas a dejarte llevar ahh... Vamos... Pide por más mhh... Se que quieres... Hazlo ahh...

Llevo una de mis manos a su pecho, recorriéndolo con claros deseos voluptuosos, pellizcando sin previo aviso sus tetillas sin dejar de moverme en su interior; haría todo lo posible por contenerme, seguir con esto hasta escucharle gritar extasiado, aunque ello implique despertar a todos los demás.

No podía contenerme mas... estaba disfrutando tanto... Sus manos recorrian mi pecho hasta que finalmente me pellisco los pezones...no podia creer ese placer...
Sentia como el mentor entraba y salia de mi interior... mi pene estaba completamente erecto casi a punto de correrme...
Pero tenia la necesidad de mas...

Maaasss... onegai.... Aaaaahg...

Estaba finalmente suplicando por mas... ya queria correrme...
Había caído en el placer...

-Ahh... Así se habla... Precioso... Mhhh...

Comienzo a moverme más rápido, absolutamente complacido por sus palabras, eevando un poco sus caderas para poder penetrar aún más profundo en su cuerpo, llevando mis labios a su cuello para morder con gula la deliciosa y tersa piel, dejando que mis gemidos mueran en esa zona. La mano que antes apretaba sus tetillas ahora se encuentra masturbando su pene al ritmo de las furiosas envestidas, alejándome de su cuello para verlo con ojos oscurecidos por la voluptuosidad y sin más preámbulo acercarme a sus labios, besándolos con hambre contenida, mordiéndolos en medio de la desesperación provocando que de la herida se deslice un hilillo de sangre que no demoro a lamer.

El mentor se empezaba a mover mas rapido que hace unos momentos al escucharme pedir mas...
Mi cuerpo no terminaba de experimentar esas sensaciones y el estremecimiento que me hacia sentir el mentor... Sus caricias hacian que gimiera mas...la mordida era un poco dolorosa pero no le daba importancia mas que al placer absoluto ... Cuando hiba a gemir con mas fuerza era callado por aquel beso hambriento el cual me hacia una herida... sentia en mi boca el sabor a sangre...sentía la lengua del mentor sobre mis labios limpiando ese hilillo de sangre... Ya sentía esa necesidad incontrolable de correr... y así lo hago...AAAAAAAAAAAHG!!!; llenando la mano del mentor con ese liquido...

Escucho el estruendoso gemido resonar en todo el cuarto al tiempo que llega a su orgasmo, esparciendo en mi mano su semilla, la cual comienza a diluirse en el agua. Continúo con los movimientos salvajes, desesperados, sintiendo como su esfínter anal se contrae producto de su final para en una última y profunda embestida llegar yo también, eyaculando en su interior.

Aún jadeante me acomodo en la superficie de la tina, recostándome en uno de los lados con el chico manteniendo aún mi pene dentro suyo, atrayéndolo hacia mi para que quede sentado sobre mis caderas. Acaricio su pecho y espalda con extrema lujuria, observándolo con un semblante que lo deja notar por si mis manos no son lo suficientemente claras; paso mi lengua por su pecho, subiendo por su cuello hasta llegar a su oído.

-Has estado excelente pequeño, me ha encantado desvirgarte... Ten por seguro que esta no será la última vez que nos encontremos, ya sea en una situación similar o completamente diferente volverás a caer a mis brazos, lo se.

Deposito un beso en su cuello y lo ayudo a incorporarse, para que se siente en el otro extremo de la tina y así comenzar a limpiar nuestros cuerpos, luego de cometer el pecado más suculento de los 7 capitales.

El mentor hace las ultimas embestidas con mas fuerza y puedo sentir como mi interior se llena de su semen... se sentia extraño...pero me habia gustado de sobremanera... el mentor se acomoda en la tina haciendo que haga lo mismo sobre el sin que este saliera aun de mi interior.. podia sentir esas caricias en mi cuerpo... era tan excitante un pecado verdaderamente delicioso....
Me sonrojo mas de lo que podia estar ante las palabras del mentor... queria tenerme de la misma manera en otra ocación...
bes ami cuello y me ayuda a incorporarme... me sentia sumamente adolorido...Empezamos a lavarnos...al termino... trataba de incorporarme pero no podía...apesar de haber disfrutado aquel pecado... no podia ni moverme... mi cuerpo no me respondia.. trate de levantarme y por poco caigo al suelo...

Lo observo ya fuera de la tina, permanece aún recostado en la misma sin mover un músculo de su cuerpo; es recién ahora que me percato del tono carmín que ha adquirido el agua, normal en esta situación. Sonrío de medio lado con sorna, ayudándolo nuevamente a incorporarse y a caminar, recostando su cuerpo a la pared y pegando el mío al suyo, aún ambos completamente desnudos, sonriendo aún más al ver su rostro.

-¿Dónde irás ahora? ¿Quieres que te deje en tu habitación o me encargo de ti por esta noche? Se podría decir que sería un bonus por tan interesante regalo.

Mientras que espero a que me conteste tomo dos toallas, amarrando una a mi cintura y otra a la suya, dejando nuestras prendas en el cesto con las demás ropas para volver a verlo a los ojos.

-¿Y bien? Tu decides.

La verdad no quería estar solo en mi habitación... no despues de esta ¨Violación¨....
Agachando la cabeza y casi en susurooo le digo...

Podria encargarse de mi por favor? Yo de verdad no quiero estar solo no esta noche...
Lleveme con usted...

Mi cara estaba completamente roja... y me sentia cansado...
Solo por que el mentor me habia ayudado a recargarme en la pared... sino me hubiese caído.

Sonrío levemente ante sus palabras, tomándolo en brazos para llevarlo desde el baño hasta mi habitación con solo las pequeñas toallas amarradas a nuestra cintura como única prenda que nos aleja de la desnudez absoluta; agradezco que todos se encuentren durmiendo en este momento, no es que me intimide ni mucho menos después de todo tengo derecho a hacer lo que quiera con estos niños, los que no tienen dueño al menos, pero de este modo se me hace más cómodo y prefiero que no me vean llevar a un niño en este estado a mi cuarto

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CERRADO

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