Tomando un Respiro

Despues de la comida, termine mis labores y desidi pasearme por el seminario, pase por mi habitacion tomando un rosario para ir a resar a la capilla como tantas veces habia hecho y era costumbre, despues de rezar desidi vagar un poco por ahi, hasta que termine subiendo al Campanario

Al estar ahi arriba mire el lugar en su explendor, sentia la brisa mover mis cabellos y no pude evitar sonreir, asi que em aserque ams a la orilla para sentarme con las piernas recojidas tocando suelo, me dedique a observar el paisaje y a algunso seminaristas que caminaban

Realmente, el lugar merece todos los calificativos que vengan a significar algo parecido a maravilloso. Un sitio perfecto... para hacer extensibles las gamberradas y travesuras.
Jeremiah no ha tenido mucha ocasión de visitar el campanario, así que aprovecha la tarde libre de ese día para subir un momento y echar un vistazo.
Gracias al plano de Marius, no tiene ningún problema para guiarse por la torre. Le parece un sitio ideal para refugiarse en caso de líos o de querer estar solo. También podría servir para almacenar material, como parece que es el caso.
Cuando llega arriba, se encuentra conque hay un mentor...
-Ah, vaya...-murmura con algo de fastidio.-no sabía que esto ya estaba ocupado.-Le mira de reojo. Supone que se lo ha topado alguna vez, pero no sabe reconocerlo. Por lo menos, no han entablado antes conversación alguna.

Escuche un murmuro y volte a aver de que se trataba encontrandome con un seminarista, me le quede observando lo habia visto en el comedor pero no tenia mucho conacto con ellos -Buenas tardes- salude cortesmente sin dejar de verle

-Buenas tardes.-Responde al saludo con el ceño fruncido. Se mosrdisquea el labio inferior unos segundos antes de continuar.-Me parece que no nos hemos visto. Supongo que, por su edad, usted es mentor, ¿no?-Eso le hace sonreír brevemente; otra vícticma propiciatoria para sus bromas. Oh, sí...-Aunque no imagino de qué puede dar clases... ¿matemáticas?-Ladea la cabeza.-Tal vez lengua. Incluso historia... No sé, no sé. Todas me gustan lo mismo. Por cierto, me llamo Jeremiah, Jeremiah Leroy...

Mi rostro nunca cambio de expresion aun con los gestos y palabras que el otro demostrababa, solamente suspiro silenciosamente con pasiencia que dios le daba -Es normal que no me ayas visto no imparto clases y no suelo entablar conversaciones seguidos con los seminaristas-

-Asi es soy mentos pero yo me encargo de la cocina, es decir la comida que comes las tres veces al dia-

-Es un gusto Jeremiah soy Lune Evans -

-Ah, así que usted es el responsable de la cocina.-Asiente varias veces ante la información proporcionada.-Señor Evans, permítame felicitarle por su labor. Las cosas que prepara son realmente exquisitas, escasas, cierto, pero exquisitas.-Le mira detenidamente durante unos intensos segundos.-¿A qué ha venido aquí, señor Evans? Si se me permite la pregunta, claro...-Sonríe de un modo que hace desconfiar.

Lo vei tranquilamente pero ese chico en verdad que era extraño, pero quede en mi pose tranquila, me expresa felicitaciones por mi comida y sonrio de lado -Gracias..- y solo agradesco

Escucho su pregunto y esta vez pongo mi total atencion en el seminarista me sonreia de una manera extraña pero curiosa algo que te daba a desconfiar, cosa que en verdad me daba igual -Claro, no tiene ningun secreto, hace rato me encontraba resando cuando termine desidi pasear por la capilla y termine subiendo hasta aqui, como me agrado el lugar y tiene una exelente vista me tome la libertad de tomarme un descanso aqui- respondo con la misma serenidad de siempre

-Y tu Jeremiah que haces por aui no tienes clases o deberes?- inquiero